El 20 de febrero de 1981 Maradona firmaría su contrato con Boca, luego de interminables idas y vueltas entre los presidentes Benito Noel y Próspero Cónsoli, al final los Xeneizes y Argentinos llegaron a un acuerdo e hicieron lo posible para que Diego, ya como uno de los mejores futbolistas del momento, se vistiera de azul y amarillo, aunque nunca imaginaron que luego caerían en una gran crisis económica.
El Campeonato de Primera División 1981, Torneo Metropolitano, fue el que abrió la temporada en Argentina. Se desarrolló desde el 22 de febrero al 15 de agosto, en dos ruedas de todos contra todos.
El primer partido fue frente a Talleres en la Bombonera, el 22 de febrero, y lo ganó el local 4-1. La capacidad del Estadio no dio abasto con el público que fue a ver al equipo de la Rivera y a su gran incorporación Diego Maradona, las puertas se cerraron dos horas antes. El Club Atlético Boca Juniors, dirigido por Silvio Marzolini y con otras incorporaciones de gran nivel aparte de Maradona, como Miguel Ángel Brindisi, el volante más goleador de la historia del fútbol argentino, obtuvo el campeonato con un punto de diferencia sobre el Club Ferro Carril Oeste. Con ello clasificó para disputar la Copa Libertadores 1982 y cortó la racha de 5 años sin ser campeón, aunque después vendría una aún peor, ya que fueron 11 años los que paso sin ganar.Por otro lado, en ese mismo Torneo Metropolitano, el Club Atlético San Lorenzo de Almagro se constituyó en el primer equipo grande que descendió a la Primera B Nacional, ya que perdió la categoría junto con el Club Atlético Colón, al haber ocupado las dos últimas posiciones de la tabla.
Todo comenzó antes con los problemas económicos y el remate en del estadio ubicado en Avenida La Plata, conocido como “el Viejo Gasómetro”. Cuando el Ciclón enfrentaba a Argentinos Juniors en cancha de Ferro Carril Oeste. Esa tarde, San Lorenzo con sólo un punto lograba la permanencia. Todos los hinchas que colmaron el estadio fueron convencidos de que un equipo de los denominados “grandes” no podía jugar en la segunda categoría del fútbol argentino. Pero se equivocaron cuando Mario Gualberto Alles, arquero de Argentinos Juniors, le atajaba un penal a Eduardo Emilio Delgado y más tarde, Carlos Horacio Salinas le daba la victoria al Bicho y lo salvaba del descenso. El partido terminaría 2-1 a favor del conjunto de La Paternal. Esta derrota dejaba a San Lorenzo anteúltimo en la tabla de posiciones del Metropolitano 81 y marcaba el peor momento en la historia del club, que descendía por primera vez en sus 74 años de existencia. Alles declararía más tarde: “Fue una sensación rara, nos habíamos ido a la B y la hinchada seguía gritando. Hasta nos ovacionaron cuando dejamos la cancha”. Sin poder utilizar su estadio y con 71 juicios en contra, el Ciclón de Boedo pasaba a jugar a en la B. Aunque respondió como un “grande”, batió records de público, ese año San Lorenzo jugando en el ascenso llevó más público que el campeón de la “A”, los equipos “chicos” llenaban sus canchas gracias a la gente del Cuervo.
Fue el 7 de febrero de 1982, luego de una caravana desde Boedo hasta Caballito, el Ciclón hacía su debut, en la cancha de Ferro. Más de veinte mil hinchas azulgranas deliraron cuando Oscar Ricardo Ros salió del túnel y se ponía en marcha el torneo para San Lorenzo. Su gente le hacía sentir que seguía siendo de primera. Llegada la sexta fecha ocurrió un hecho histórico. San Lorenzo visitaba a Tigre que hacía de local en cancha de River Plate, por la fecha 6 del torneo. Ese día, se vendieron un total de 70.948 localidades (esa fue la cantidad de gente que pagó entrada) y esa convocatoria se registra como la tercer mayor a lo largo de la historia del Estadio Monumental luego de la final del mundo de 1978 entre Argentina y Holanda y la final de la Copa Libertadores de América de 1996 entre River Plate y América de Cali. 
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